Transiciones

Digo la verdad con señales de humo,
hay sensuales mañanas escondidas,
debo sinceridades que no pagaré,
la muerte y yo por el túnel del amor,
dejando al azar sin suerte,
almas ardientes que jamás cederán.

Se han reconciliado todos los Dioses,
ya no aguantan la vejez, la indecisión,
no comprenden ya a la confusión,
y no esta nada mal que dejen de ser esclavos,
no harán siquiera sus maletas,
vagabundearán bonito y malditamente.

Las fiestas azules en la casa del asombro,
mezclas suicidas abandonándonos al costado de las horas,
me dejaré sin ideas, me convertiré en un traidor,
ya he visto a las luces que sin más; se apagan,
llevo conmigo una sentencia que no me pertenece,
quiero melancólicas alegrías,
heridas que nadie quisiera entender.