11/2/07

Como un cazador

¡Dios, convierte la lluvia en vino¡
Un mundo sin muerte,
muerte, hiciste emocionante la vida,
ya no eres incomprendida,
ni tan horrenda tu vocación.

Lo absurdo de seguir,
lo absurdo de parar,
tampoco buena idea dejarse llevar,
solo que nada es tan critico,
ni tan vital.

No te preocupes,
ni aceleres al tiempo,
camina despacito con calma,
y corre sin mirar atrás.

La ausencia también es presencia,
profunda, honda, tan de mar,
factoría de descubrimientos,
de certezas.

No hay comentarios.: