La ultima Batalla

Comentan los ardientes corazones,
que en las fronteras ya no espera Soledad,
el pasado tomo ventaja al presente,
y sin angustias, abrazó a tu despedida.

Es la realidad lo que mantiene al mundo tenso,
mientras tu mi muchacha gigante, tan lejos y cerca,
vuelo al olvido, vuelvo a los amigos verdaderos,
las calles aún arden por algún esporádico encuentro,
elegí no cambiar mis puentes con sus esteros,
ni el camino de vuelta a casa,
ahora el vació esta harto de mi,
se rebosa sin pensar en parar, ni dejarme soñar.

Esta vez el eclipse no para de ocultarte,
esta vez no saco pecho, ni más techo,
tengo el As de espadas ardiendo en mi herida,
tengo el don para incendiarme tan intacto tan sano.

Pasa el tiempo y amar a alguien que nunca ha amado,
son pensamientos que el presente inyecta en mí,
el amor me obliga a firmar bajo sus términos,
con un revolver queriendo exhalar en mi frente.

Con perfume en mi voz hablo a tus sentimientos,
la cobardía que me ha dejado la ausencia de tu mirada,
me he tornado un cuervo con las alas rotas,
con su mejor traje la fantasía vino a despedirse,
me quiebro y amontono las cenizas.

Despierto a la mariposa de su capullo,
y ella con misericordia me lleva a morir al desierto,
sepulta mi desnudez, incinera sin fuego mis besos lúcidos,
no encuentra ni resignación ni olvido ni excusas en mí,
no se cuantos desiertos más decidirán habitar en Eduardo,

Es verdad que olvido hasta mi más profundo dolor,
también es verdad que siempre he mentido,
que nunca olvide a nadie,
recuerdo en silencio ternuras y bienvenidas.