Me fui

Diré la mentira en tono de verdad, (casi)
aunque por poco caigo y miento, y caigo,
estoy débil de ensayos, del centro de vos,
dirá tu voz : “escúchame, soy nadie en ti,
invisible compañía alterna del dolor”,
que para algunos, (para Eduardo), adicción,
que no sea dorado el pasado de él, who know?.

Ábrele la puerta al rubor, al humor,
condiciones de un rió desbordado de ternura,
fui el miserable rompe corazones sin esquina,
y el pianista ebrio sé rió.
de mi falta de control.

Me dirá la paz que deseo escuchar,
y aunque tenga mis ojos cerrados,
o que me los encierren, quizás ignoren,
el cielo me verá y yo lo veré a el,
a ella, acompañándome, soy la segunda voz,
temblé por la esperanza y ahora que se fue,
soy un Dios sin fronteras, ciego e invisible,
solitario en mi vida nadie podrá contra mi.