Hablemos de las Putas, Joaquín.
El caso es que eran ya las doce de la mañana y quedaba solo una puta de unos cincuenta años, bastante recorrida. Es verdad que la iluminacion del lugar maquillaba ese tipo de cosas y el alcohol también. Entonces nos miramos y nos dijimos ¿Que hacemos? y ella me propuso que la acompañara a tomar una copa y yo le dije que si, encantado. ¿Me puedo llevar a un amigo? me pregunto de pronto, y yo: Naturalmente.
El caso es que el amigo era el enano del bombero torero. Así que, en alegre procesión y silbando una alegre cancioncilla, la chica, el amigo y yo nos subimos en un taxi y nos dirigimos, con una alegría digna de la mejor causa, a unos departamentos por horas de Capitan Haya. Quisiera tener un vídeo de lo que vio el portero cuando entramos: La puta crepuscular, el enano del bombero torero y yo con esa cara de no estamos borrachos y esto no es lo que parece. Pedimos champán y nos tumbamos en la cama a bebernoslo y a discutir sobre cosas que ahora te no sabría decir. Si recuerdo que la puta me atacaba y yo no me defendia. Y hubo un momento en el que me di cuenta de que habíamos alcanzado tal grado de descontrol y de desastre, que me dije: Como te descuides, Joaquin, el enano te hecha un polvo....CONTINUARA
No hay comentarios.:
Publicar un comentario