Como un suspiro

Que buen tiempo para vivir,
las ilusiones son libres,
las estrellas ríen con las bromas de papá,
mi súper héroe; Zeneida, que me dice la verdad,
pura nobleza desbordante de luz, aunque finja, aunque diga que no.

Saber que ocurre, sin enterarme en las noticias,
escucharte salir, verte entrar, el sueño que no quiero despertar, si aumentar,
en emoción, en necesidad de ustedes dos, mira vos.

Los conservo en poderosos hologramas,
abrazos de adiós, abrazos de Dios, te doy la mano,
les digo acérquense, que soy el único que queda en la tierra.

Un mar no son ustedes dos, ustedes dos,
alguien entenderá, y aunque pinte con tres colores,
mis payasos están conmigo, tan sensibles, tan míos,
el orgullo de planear con vos, aquellas ventanas que nos gritarán realidad,
que risotada tomar tanto para decir que sos la mejor,
los entiendo porque me entiendo, y trabajo para perderme,
dar vuelta en la esquina, parecerme más a Dios, más a mi.