Parque Jamaiquino
Crece el alma derecha de mi bien,
se extiende llegando a saborear dulce nube,
llevo noches observando hojas frías sudando,
sonrisas condicionadas, y el cielo desterrado.
Crecen los obstáculos y me tiene,
sin importante importancia el sufrido reloj,
le enseñe aquella madrugada brillante,
no olvide crepuscular obscuridad,
en la cama conocí a su diablo,
la cama nunca quedo grande,
termine loco, volví a crecer loco, empecé otra vez loco.
Una gallina en el malecon de Guayaquil,
minutos despues sangre, la actriz se corto todo el cabello
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