19/4/07

El primero en olvidar

El futuro se ha consumido mis botellas,
lo esquivo en cada esquina,

aprendió ya a dar propinas en mi cantina.

Mi primer futuro renuncio a mí,
dejo sus claveles secándose, se llevo su ataúd,
no tengo la culpa que su cruz, no sea mi cruz,
réquiem a mi futuro herido, ido.

Con un racimo peinado de Rositas de la esquina,
voy caminando por las calles con sus nubes negras,
bienvenida a la carretera desolada, mi destino de niño,
vendeme niño, anda; un apagón inesperado,
esa mano que acaricia con las uñas.

Porque un destino sin futuro es ahora mismo,
me detengo para ganar tiempo, también para perderlo,
con un hueco en mi pantalón,

En la academia, ayer abordamos un velero,
encontramos mil islas desiertas llenas de hombres.


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